Desiderata. La firma eligió a la modelo Naomi Preizler para mostrar su nueva colección Suit me, en donde la sastrería es el eje de la misma. El espíritu de la colección, un mix de décadas que definen una nueva modernidad urbana. Color, estampados figurativos de los sixty’s, faldas plisadas y blazers.
María Cher. El color rojo es el “must” de la temporada, que junto con el crema y algunos acentos en bordeaux, componen un conjunto tanto para el día como para la noche. La versatilidad del color permite combinarlo con jeans para el casual wear, y con cuero y gamuza para la noche. También se vera el nude, rosa viejo y el negro. Protagonizan los estampados étnicos y animal prints. Las prendas claves serán los enteritos y pantalones palazos, camisas XL y los sacos de corte masculino. Las camperas tipo motoqueras y las pieles siguen vigentes. En los pies, las botas de caña súper alta son un must como también los mocasines.
UMA. La firma se inspira en París, en sus calles y pasarelas. Las principales tipologías de los años 60 se ve en las morfologías de los sacos, pantalones y tapados, y se conjuga con rasgos étnicos de diferentes culturas con la incorporación de flecos y bordados. Las rayas también son protagonistas ya sean bicolores o multicolores mientras que el contraste de texturas invita a combinar con libertad. Tejidos de punto grueso, lanas y paños abrigados se intercalan con telas livianas, gasas y sedas.
DelaOstia. La nueva colección de la firma propone tonos bordó, tostado (como continuación del Camel), azul marino combinado con negro y pero el rojo bermellón es el tono de la temporada. El cuero, lo hippie y los vestidos largos, son protagonistas. En la línea Sexie Hippie mucho Oxford en mangas y bocamangas mientras que para la noche lo traslucido combinado con el cuero y detalles en dorado son un must. Los detalles de pieles y las prendas bicolor en vestidos de línea recta hasta el piso también tendrán presencia. En los pies, siguen las plataformas altas mientras que aparecen las rectas y no tan altas para usar de día y noche.
Vitamina. La firma se inspiró en paisajes nórdicos con bosques y en contacto con la naturaleza. Con reminiscencias de los años 50’, las prendas son atemporales y con tintes modernas. Son infaltables los detalles en piel y cuero en los abrigos y los sweaters marcan tendencia en su versión colorblock o con motivos geométricos. En los pies, zapatos con punta redonda o cuadrada, botas caña alta y borcegos.
Paula Cahen D’Anvers. La firma presentó una colección urbana y sofisticada. En sastrería la utilización de espigados, lana y franelas dan un toque masculino a cortes muy femeninos, sacos de terciopelo en una amplia gama de colores y tejidos de pie de poule con pitucones. La novedad de esta temporada es una línea de noche donde se mezclan el brillo y las trasparencias, gracias al uso de paillettes, cuerinas, encajes y tules.
Wanama. Una temporada donde los tejidos y los abrigos son los grandes protagonistas. La inspiración parte en tres ejes. Una es Tribal Navajo con inspiración folk en donde se parte de la cultura navaja con texturas, rústicas, guardas en escala gigantes y colores vibrantes. La prenda “it” es el poncho. La línea Eco Wild Life se basa en el cuidado al medio ambiente con estampas, dibujos y texturas de pieles, vinculadas a la naturaleza y los animales. Por último, Tokio Skyes, con prendas románticas que hacen hincapié en la paleta del cielo al amanecer y cuando cae el sol. Materiales nobles sobre gasas de seda y géneros etéreos.
